Incierto (relato corto)

Y el mundo se apago de repente, cientos de millones de vidas, no solo humanas, sino también animales y vegetales, todo murió.

-Mas te vale que te termines todo el desayuno- Exclamo la mujer con su nariz llena de moco, provocada por una fuerte gripe.

-Madre, por favor, ni siquiera enferma te dejas de preocupar por regañar a Luisito- Contesto el hermano mayor de nombre Cosme- Todo por quedarte en el chisme de anoche...- 

La mujer solo se limito a tomar una servilleta y regresar a la sala, la noche anterior algo había caído del cielo, iluminando todo, parecía que se había hecho de mañana en un segundo, muchos vecinos salieron, otros no lograron ver al objeto que había iluminado el barrio y según ellos, había caído a unos dos kilómetros, en una zona donde había montañas y un bosque pequeño, el objeto había ocasionado un sonido similar a un silbido pero demasiado agudo y al tocar tierra la mayoría de los vecinos alegaban que había sonado igual a un trueno en plena tormenta. Pero no era el primero, tres días antes otra cosa era la noticia central al caer en una ciudad de otro país, cayendo sobre una iglesia, miles de feligreses de rodillas, otros confesándose y un sacerdote en estado de shock. Un meteorito, así decían todos, así lo nombraban los expertos.

Esa mañana Cosme llevaba a su hermano menor a la escuela, la verdad siempre lo hacia, pero esta vez su madre estaba enferma así que el le había preparado el desayuno y el lo recogería a la hora de la salida,

-Hey Cosme- Saludo uno de sus compañeros de clases mientras se acercaba a los dos hermanos que caminaban por la calle- ¿Supiste lo de anoche?-

-Chingado Alejo, suficiente tengo con que mi madre estaba con gripe y se paso hasta la 1:00 AM afuera de chismosa y hoy amaneció peor como para que vengas a contarme lo que ya se- 

-Alejo pendejo- Susurró Luisito.

El amigo miro bien a Cosme y luego miro al niño: Lo has enseñado bien- Dijo dirigiéndose a su amigo.

Los dos jóvenes llegaron a su escuela después de dejar a Luisito en la suya, ambos hablaban de las chicas de la escuela que les gustaban, las que querían tener, las que no agarrarían ni borrachos y las chicas que estaban enamorados de ellos, que eran un total de cero. Ambos eran unos completos estúpidos, tal vez inteligentes, con buenas calificaciones en los exámenes, pero no sabían como tratar a una mujer, no sabían respetar a nadie, mas de una vez habían estado en la dirección por faltar el respeto a alguna compañera, ademas de que sus típicas frases de adolescentes calientes las cuales no sabían decir en voz baja, no les ayudaban en nada. En resumen, ninguna mujer los tomaba o los tomaría en serio. 

-Como si no tuviera suficiente con llamarme Cosme, tengo que cuidar a mi hermano al 100%, mi padre quiere que lo visite en su casa con su nueva esposa y la chica que me gusta...-

-¿Cual de todas?- Interrumpió Alejo.

-Annie-

-Ah... Ella, pues no tiene novio, así que la puedes invitar a tu casa, le dices que a ver películas... O puedo prestarte mi casa y...-

-Ese es nuestro problema- Comentó Cosme- Solo pensamos en sexo, en la vida hay mas que eso, cada quien vive en sus propias esferas de realidad, pero mira, están cayendo meteoritos del cielo y a nadie le importa-

-Podemos hacer nuestra tarea de eso, nos pidieron una investigación, que mejor que eso, el internet debe estar tapizado del tema de los meteoritos- Propuso el amigo sonriendo- Esta misma tarde podemos comenzar, es para el miércoles próximo pero igual podemos ir empezando...-

-Y...- Agregó Cosme- ¿Lo de invitar a Annie a tu casa sigue en pie?-

-¿No eres el mismo que hace minutos me dijo que hay mas en la vida que sexo?.

Las clases terminaron como era de esperarse Annie ni siquiera considero la idea de salir con Cosme y lo rechazo al instante.

La madre de Cosme se había quedado profundamente dormida gracias a las pastillas, ni siquiera se dio cuenta que el joven se olvido de pasar por Luisito a la escuela y el niño había llegado solo, cantando canciones del momento y con la mochila arrastrando.

En internet mucha gente escribía acerca de avistamientos de objetos estrellándose, mismos que no aparecían en las noticias de la televisión ni en ningún medio oficial, al parecer la cifra de esos impacto era calculada en cientos y lo peor de todo, había quienes decían que sus familiares habían muerto a causa de efectos secundarios de los meteoritos, como incendios, derrumbes, accidentes de coches y hasta infartos.

-La gripe de tu mamá es un efecto secundario de una roca espacial ¿No?- Dijo Alejo mirando a su amigo- Podemos añadir eso-

Cosme solo miro  fijamente a su compañero.

-Mi madre no ha muerto- Dijo serio.
Las horas transcurrían y los dos jóvenes continuaban investigando y cada vez encontraban mas y mas testimonios de los objetos que se estrellaban en la tierra en diferentes partes del mundo, encubiertos, tal vez por los mismos gobiernos. Y no eran los únicos en percatarse.
Un astrónomo se encontraba haciendo su rutina de trabajo, no era algo que pagara mucho, pero lo apasionaba, ademas de ser el único de su ciudad, en realidad esto de investigar los astros, el espacio exterior, la tierra, el cielo, era su segundo trabajo, era profesor en una universidad, a quien le importara lo que hiciera después de dar clases. El hombre de cincuenta y tantos estaba leyendo informes, buscando en Internet al igual que los dos jóvenes lo hacían, veía como cientos de rocas espaciales estaban cayendo del cielo, estaba preocupado, según las probabilidades si estos fragmentos impactaran seria en el mar, si tantos estaban precipitándose en tierra serian muchos mas de lo que creyeran.
-¿Papá?- Se escucho la voz de un joven que abría lentamente la puerta de la oficina del astrónomo. El señor estudioso del espacio se aparto de su computadora unos segundos y se froto los ojos para atender a su hijo.
-¿Qué sucede? Ya casi iba a casa-
-Mi mamá no dejaba de preguntarse por ti, esta nerviosa, con el meteorito que cayo en la iglesia hace días...-
-Ya voy- Interrumpió su padre- Hijo, yo se que no te interesas mucho en el universo pero... hay algo que me preocupa, los medios de comunicación, los gobiernos esta tapando mucha información, pero hicieron un hoyo muy pequeño para enterrar demasiado y tarde o temprano todos nos enteraremos que todos estos meteoritos no son una casualidad, algo malo esta sucediendo o a punto de suceder-
El joven paso saliva, sabia que su padre no era un loco que hablaba del apocalipsis, era un hombre estudioso, ademas de un completo escéptico, siempre investigaría algo durante años antes de darlo por hecho.
-¿Quieres decir, padre, que tendremos mas impactos como el de hace días?-
-Tendremos mas, peores eso creo, estamos teniendo muchos, solo que no quieren revelar la información, como te dije, han caído alrededor de 90 en Rusia en las ultimas semanas, en otros países han caído también, la mayoría del tamaño de pelotas de golf, me temo que caigan mas grandes, tal vez el mar haya tenido el cuádruple de impactos que la tierra, ni siquiera nos damos cuenta de ellos, dos testimonios en Marruecos, uno en Taured ¿Qué tanta densa debe ser la lluvia de rocas para que caiga una en Taured?...-
Cosme se había quedado dormido esa tarde, después de terminar su tarea en equipo con su mejor amigos y de lo que estaría seguro tendrían una excelente calificación, su informe por titulo: "La inminente exterminacion de la tierra a causa de un asteroide y como el campo electromagnético de júpiter nos salvara" era algo que que lo llenaba de orgullo y lo hacia sentir como el mejor científico del planeta, varias horas en paginas de internet y de vídeos explicando los meteoritos y asteroides, habían servido de mucho. Alejo y el obtuvieron una buena calificación, a pesar de que muchos, inclusive el profesor los vieron como exagerados respecto al sonado tema del meteorito caído en la ciudad. Las horas pasaban la tierra estaba condenada, a ciencia cierta no sabían que pasaría, a que hora, se decía que los grandes científicos y lideres mundiales si tenían razón de los hechos que sucedían, eso era incierto, la mente humana estaba oscura ante todo, como animales en el matadero, a horas, minutos o segundos de morir de forma cruel y las vacas tal vez no lo sepan, así estaban las personas en esos momentos.
Los siguientes días fueron caóticos para el astrónomo y su hijo que se intereso en estarlo acompañando con sus investigaciones. descubriendo cosas terribles que se venían destejiendo desde hace décadas, cientos de cosas encubiertas, descubriendo que el final era inminente.
-Supiste que hubo un impacto en Sudáfrica?- Dijo Alejo mordiéndose las uñas- Cayo lejos de la civilización pero dicen que el estruendo se escucho en varias ciudades aledañas, de varios kilómetros de retirados-
-Si, probablemente es verdad lo que dijimos en nuestro informe, el mundo terminara con un asteroide, como dicen que termino con los dinosaurios, probablemente los nazis sobrevivientes si vivan en la luna, quien sabe, como dije- Comento Cosme- seriamos muy afortunados si un asteroide nos toca-
-¿Qué tal cientos?-
-Cállate alejo, me pones nervioso ¿enciendes la radio por mi?-
Alejo lo miro confundido y se levanto a encender una vieja radio que se encontraba en una mesa al lado de un sillón.
-No puedo ni siquiera ver la TV o estar en Internet Dijo Cosme serio- prefiero enterarme de las noticias, escuchándolas, es como si me las dijera algún amigo...-
-No seas ridículo- lo interrumpió su amigo Alejo.
-...Y esto fue "Soldier boy" de The Beatles, recuerden que aun tenemos boletos para su concierto en esta gira del adiós que están dando, en noticias internacionales el supuesto impacto de un objeto espacial provoco un incendio en gran parte de un bosque en China, se están tomando todas las medidas necesarias para que evitar desastres en pueblos cercanos a la zona...-
-Ahora China... pronto todo el mundo estará acabado-
-Tranquilo Cosme, no dejes que te afecte, es como aquellas epidemias de virus, lo peor de ellas era el miedo que se generaba en las personas, se sugestionaban demasiado-
-O puede ser que estemos en lo correcto-
Los días pasaron y comenzó a haber confusión y miedo en varias partes del mundo, caminos bloqueados, las personas dejaron de ir a trabajar, a la escuela, las tiendas eran saqueadas, muchos vivían encerrados, todo un escenario apocalíptico, lo que muchos habían visto en las películas que nunca creyeron se hiciera realidad. Por suerte la ciudad donde vivía Cosme aun no era afectada por tales actos, la gente ya sabia lo que estaba sucediendo, pero muchos aun no creían que fuera cierto o que un asteroide que impactara en algún lado de la tierra los afectaría a ellos, pensaban que estarían a salvo.
-Hola me llamo Cosme- Comenzó a escribir en una de sus libretas de la escuela- Creo que tengo el nombre mas estúpido del mundo y hasta hace unos días era un joven como cualquier otro, tenia sueños, esperanzas, me divertía y no me preocupaba por muchas cosas, mi mejor amigo y yo hicimos una investigación acerca del objeto que había caído del cielo días atrás y de otros, descubrimos algo terrible, cientos de objetos estaban cayendo, hace una semana que no se de el, no se si lo extraño o no, no tengo animo ni mentalidad para ordenar mis propias emociones, no se ni que siento, no hay internet, hubo un colapso o no se que paso, no hay teléfono y la televisión no capta ninguna señal, la radio de repente capta extrañas conversaciones y sonidos, no se en que idioma este. Mi madre empeoro gravemente, no hemos ido al hospital y ni siquiera tuvo medicina desde un principio, me da miedo entrar a su habitación y encontrarla sin vida, aunque la muerte por gripe es mucho mejor que la muerte que nos espera a todos, no se que hicimos para merecer este castigo, en que fallamos todos o solo unos pocos nos condenaron a todos, mucha gente buena en el mundo y todos tendremos el mismo destino... Todos, ni siquiera entiendo ¿Por qué estoy escribiendo esto? nadie lo leerá.
La tierra aguardaba para la mayor amenaza, varios kilómetros media esa monstruosa roca que estaba afectando ya la órbita terrestre y las mareas y estaba a solo días, horas y segundos de comenzar a colapsar, comenzó el tiempo de oscuridad y muerte.
-Hijo, vamos a casa con tu madre, debemos estar juntos en este momento, veamos una película, tal vez, cenemos algo rico, cerremos las puertas, no dejaremos que el pánico nos invada- Dijo el Astrónomo tomando a su hijo por el hombro con tranquilidad, su hijo afirmo con la cabeza, sus labios temblaban pero decidió estar sosegado y caminar al lado de su padre.
Cosme había visto el destino, tal vez le debía importar si su madre estaba enferma en su cuarto, profundamente dormida por las pastillas que tenían en casa, no eran para su enfermedad pero al menos funcionaban para relajarla no para quitarle la gripe, sentía como el corazón le latía muy fuerte y un zumbido en su cabeza lo aturdía. Se dirigió al cuarto de su hermano pequeño y se puso a jugar con el, tranquilizándose, mientras el caos comenzaba afuera y el mundo exterior comenzaba a terminar.

FIN